El hada madrina

De tanto escuchar al Hada Madrina
me he vuelto estúpido.
 
Que si el camino recto,
el camino adecuado,
el buen camino...

Cómo anhelo desollarme
contra un enjambre de zarzas
y dejar que mi sangre tizne
el cuero de la lujuria.

Vaya mierda (2)

Me han mandado a la mierda
en menos ocasiones
de las que hubiera deseado.

Pasé de adolescente,
balbuceante e imberbe,
a adulto titubeante
que no se comía una mierda.

Pero ya no me quedo con las ganas
de intentar lo que sea
sin red que pare la caída.

Ahora con la edad,
la cara dura y los espolones
me importa una mierda que
me manden a la mierda.

Neverland

Campanilla se muere por los besos que Peter le niega.

No comprende que se ha quedado anclado en

Nunca Jamás

y

nunca jamás

conseguirá capturar espumillones de los ojos, por muchos cargueros que crucen el mar de su frente.

Yo un día fui como ella, pero ahora me columpio en un viejo garfio:

así esquivo a los espíritus de los niños perdidos.