Inocencia
Sentir el fulgor de los colores sobre lo desvaído de la miseria es habilidad reservada a corazones pueriles. La candidez y el asombro tejen ese velo que no permite intuir la lágrima y la fatiga bajo el maquillaje del payaso. Ya me gustaría guardar en mi bolsillo —hace años descosido— unos gramos de aquello que perdí con el beso de una polilla. (del poemario Circo)