Una pompa de jabón

La pompa de jabón se desplazó suave y temblorosa a un par de metros del suelo. El hombre pudo distinguir sobre la superficie jabonosa el reflejo de su rostro. En un instante, él desapareció sin dejar rastro, pero su imagen quedó atrapada para siempre en la delicada burbuja.

Víctor M. Jiménez Andrada.
Publicado en AVP 16/4/2012.
Ilustración: Vicens Tort Arnau

1 comentario:

Ángela. dijo...

Es lo que pasa con las pompas de jabón.